La Sultana del Norte se inundó de música el pasado sábado en un súper maratón
Por: Aracely Chantaka
10-Noviembre-2008
Carretadas de rock para todos los gustos fue lo que se vivió en cerca de 11 horas del “Zero Fest”.
Bandas legendarias como Los Fabulosos Cadillacs y Jaguares animaron el concierto que se celebró en las instalaciones del Parque Fundidora, donde se dieron cita cerca de 15 mil personas.
Fue un coctel de música, de propuestas, de banderas e ideales que se reunieron en un mismo sitio para una dar paso a una “tocada” inolvidable.
Los escenarios, el rojo y el negro, estuvieron muy activos desde las 15:00 horas en que comenzó el desfile musical con bandas como Zoé, Thiervey Corporation, Los Bunkers y Junkie XL, entre otras.
Los más esperados fueron Los Fabulosos Cadillacs, quienes despertaron la emoción de la audiencia, jóvenes en su gran mayoría.
Los argentinos se volvieron a reunir y los regiomontanos no querían perderse el suceso.
Antes de la presentación de Los Fabulosos, tocó a The Mars Volta animar a los rockeros. La primera canción de los gauchos fue: “Manuel Santillán, El León”, que de inmediato puso a todos en órbita.
Otros de los éxitos que desfilaron por el repertorio fueron: “Estoy Harto” y “Carmela”, el vocalista de la agrupación, Vicentico, manejó a la audiencia a su antojo.
El Parque se convirtió en un coro multitudinario que estremeció el inmueble regio.
Pero así como Los Fabulosos tuvieron éxito, Los Jaguares liderados por Saúl Hernández no se quedaron atrás.
Como es su costumbre, Los ex Caifanes llegaron con su mensaje social a favor de las muertas de Juárez, crímenes que nunca se han aclarado en nuestro país.
El rugido de esta agrupación inició con “Un Silencio”, tema que dedicaron a esta mujeres que han muerto en condiciones no aclaradas por las autoridades.
Saúl mencionó que en México hacen falta más hombres y menos machos, lo cual fue muy celebrado por los presentes.
El repertorio también incluyó: “Mátenme porque me Muero”, “Afuera”, “La Célula que Explota” y “Nubes”.
Mientras la agrupaciones hacían lo suyo en el escenario, en el inmueble la venta de cerveza y comida se daba al por mayor.
En total fueron casi 11 horas de descargas musicales que dejaron a todos más que satisfechos.
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